"igualmente me es imposible dudar de mi existencia ya que estoy pensando, aunque me engañe tengo que admitir que yo me engaño, Soy Algo, y no nada, o sea que la existencia de mi yo como sujeto que piensa es cosa cierta. cogito ergo sum = pienso, luego existo resulta pues ser una verdad y una certeza inconmovible".
La esencia del alma es el pensamiento, lo cual se prueba del modo siguiente: todo lo que puede sustraerse a la idea de una cosa, permaneciendo intacta su esencia es porque no pertenece a la esencia. Ahora bien, puedo concebir el alma prescindiendo del cuerpo por eso no puedo concebirlo sin la facultad de pensar. Pensar y ser es lo mismo en el alma: Cogito = sum
Por tanto, alma y cuerpo son no sólo dos sustancias distintas sino con propiedades irreductibles y opuestas: pensamiento y extensión. Entonces ¿Cómo explicar la unión entre ambos y la manifiesta interacción? ¡Jeronimo se encuentra perplejo!, la antinimia es tan fuerte que no acierta a conciliarla.
baaaaaaaaaaaaa, Esta es la precaria explicación al problema de la comunicación e interacción entre alma y cuerpo. La solución es del todo insuficiente, Si eso es el hombre, con mayor razón los animales son puras máquinas, sin alma, que nada conocen, nada sienten, nada esperan, nada temen; son autómatas complicados, gobernados únicamente por sus reflejos. plop..
es entonces cuando Jeronimo decide jugar a otras cosas y seguir a la espera de un Filofoso para poder debatir
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